El recibo de nuestros haberes previsionales del mes de julio nos anotició que el aporte extraordinario sigue vigente, y esto sin que haya existido previamente información hacia los afiliados por parte de las autoridades de la Mutual y tampoco desde el Banco. Esta circunstancia nos permite hacer las siguientes reflexiones:
La continuidad del aporte extraordinario no fue comunicada por AMEBPBA a nuestra entidad, ni tenemos registro que lo haya hecho a los afiliados individualmente. Si bien parece calculado con un menor porcentaje, el monto resulta ser mayor que en meses anteriores, agravando aún más los ingresos netos de los jubilados y pensionados.
Como lo hicimos desde el principio, rechazamos este aporte extraordinario devenido en permanente, que lamentablemente pareciera contar con la convalidación de otros sectores que dicen representar a los jubilados y pensionados del Banco. Pero en esta oportunidad, no solo fue decidido a nuestras espaldas sino que ni siquiera nos fue informado; lo decidieron clandestinamente, faltándonos el respeto.
Nuestra entidad desde hace varios años ha tratado seriamente la eventual crisis de la Asociación Mutualista, ha presentado propuestas que han caído en saco roto, y ha publicado cuál sería el principal problema en sus erogaciones, sin que se haya respondido a nuestras consultas de datos ni hubiera información de los estados contables y el detalle de la composición de las partidas que los conforman. Por otra parte, siempre sostuvimos que la comisión de los servicios sociales y el Banco tenían responsabilidad sobre lo que estaba ocurriendo y fundamentalmente que resultaba necesaria que ellos efectuaran una auditoría a AMEBPBA.
Ahora, agregando un nuevo ingrediente a la opacidad de la situación, aparece en redes sociales el grupo anónimo “Indignados por la Mutual”, que critican y dicen que AMEBPBA los necesita para reemplazar a las actuales autoridades o, se puede inferir, eventualmente participar con las mismas de la conducción. No olvidemos que hay sectores gremiales que no participan directamente en la actual comisión directiva. Destacamos que Grupo Siglo no tiene nada que ver con estos personajes ignotos que hasta el momento no han dado la cara. Además, estos “indignados” han mencionado que se estaría realizando por parte del Banco una auditoria, evento que por su trascendencia reclamamos se informe a los afiliados si es cierto y, si lo fuera, que se haga público el informe sobre sus resultados.
Suponemos que como respuesta a los “indignados”, la CD de la Mutual emitió el 11/08/22 la Circular 901 conteniendo argumentos reiterados pero sin sustento en datos concretos que permitan verificarlos. Expone una situación normal de atención al afiliado y de relación con los profesionales que nos parece dista de la realidad que vivimos quienes recurrimos al servicio de salud y se contradice con la deserción de muchos profesionales que nos atendieron históricamente.
Pero además, después de tres años esta circular nos informa que el Banco no estaría cumpliendo con el aporte sobre las comisiones e intereses y que estarían reclamando por ese tema, que seguramente involucra montos importantes. Esto es grave, porque se blanquea que el argumento de menores aportes de los jubilados y pensionados (que siguen aportando por el 100% de sus remuneraciones y aun los aumentos del primer mes que no cobran) como siempre afirmamos no sería el problema mayor, siendo lo más significativo ese aporte especial del Banco, que de haber sido limitado es imprescindible que todos los afiliados conozcamos por qué motivos.
Reiteramos lo que venimos diciendo desde que se inició la “crisis” de la Mutual, ya antes de la pandemia. No se puede incrementar el plantel de empleados irresponsablemente y tampoco remunerarlos como si fueran bancarios, hasta pagándole cifras que no tienen aportes.
La conclusión es que cuando el Banco retaceó fondos especiales las autoridades recurrieron a gravarnos con el Aporte Extraordinario, a fin de continuar financiando pagos que no corresponden.
Instamos a todos los afiliados a que se involucren de todas las formas posibles (correos electrónicos, páginas web, redes, etc.) haciendo conocer sus opiniones.