La Caja está incrementando los haberes de afiliados que reclamaron por la ilegal falta de inclusión en ellos de las sumas no remunerativas, y deberá pagar considerables reajustes para cumplir con la ley.
Nuestra Asociación Civil con personería legal siempre reclamó (lamentablemente en soledad) por esa violación y promovió las presentaciones administrativas, que luego los beneficiarios en forma individual llevaron a la Justicia, la que y mediante decisión de su máximo tribunal provincial ha fallado a su favor.
Los numerosos jubilados que iniciaron hace más de 10 años causas contra la Caja hoy se ven reconocidos (aunque tardíamente) en forma definitiva. Hay que estar atentos y expectantes a que se conozcan nuevas decisiones favorables al respecto y a que la Caja cumpla con lo dispuesto, aunque ya tenemos ejemplos que lo estaría haciendo.
Este reclamo ahora reconocido legalmente, nunca fue acompañado por las gremiales y otras entidades de jubilados, y significa que tanto el Banco como la Caja nunca cumplieron con la ley, lo que no solo perjudicó a los beneficiarios, sino –como lo hemos dicho reiteradamente- también a los servicios sociales.
Es de singular importancia que se reflexione sobre el cumplimiento de la ley y que el Banco no haga pagos no remunerativos más, aun con el consentimiento gremial y la falta de reclamo de las entidades cuyos asociados resultan afectados.
El caso paradigmático es la Mutual. Si bien entendemos que sus problemas actuales y desde hace tiempo se generan principalmente por los gastos derivados de un plantel de personal que ha crecido desproporcionadamente y para peor con haberes que no corresponden a la actividad de sanidad que desarrollan, también han mermado los ingresos por retenciones a los activos y contribuciones del Banco sin incluir una parte muy importante de las remuneraciones de los empleados.
Lamentablemente se viene corroborando la falta de solidaridad de las gremiales, porque por un lado los trabajadores aportan sobre su total de remuneraciones (blancas, grises y negras) a la Bancaria pero no lo hacen a los servicios sociales y son cómplices de que el Banco tampoco lo haga. Cuántos millones de pesos, desde hace muchos años, no ingresaron a la Mutual (y a las otras entidades del personal) sin que sus directivos digan nada y por el contrario irresponsablemente hayan acordado sueldos ajenos a la actividad y hayan incrementado discrecional y desmesuradamente (sin concursos) su plantilla de empleados; los que, agravando la situación hoy afectan con medidas de fuerza la atención de los afiliados, especialmente a jubilados y pensionados.
Mientras tanto los jubilados y pensionados aportan sobre el total de sus remuneraciones, no solo el aporte mensual (que también incluye a los incrementos que por primer mes no cobran) sino que también el adicional de “emergencia y transitorio” que también se liquida de esa manera.
Esperamos que hacia el futuro no se vuelva a convalidar esta práctica de pagar ilegalmente remuneraciones sin aportes. Nuestros asociados y los beneficiarios en general saben quiénes se han doblegado y traicionado sus intereses por acción u omisión. Deseamos que eso no ocurra nuevamente, ahora que dejando de lado un posible fallo favorable de la Corte por inconstitucionalidad de la ley 15008 se está negociando no sabemos qué.